EL DINERO Y EL PAN DE LA VERGUENZA

Siempre hemos escuchado que el dinero trae oscuridad espiritual a las personas, que las vuelve avaras, envidiosas, egoístas, manipuladoras y demás cosas. El dinero se ve como algo sospechoso e indigno, si queremos llegar al cielo. También, hemos escuchado o nos hemos dicho, "tengo que ganar dinero", "necesito dinero", es como si el dinero fuera un mal necesario.

Sin embargo, ¡El Dinero es Luz!

El dinero no es una cosa, el dinero es energía; y depende de como usemos esa energía puede ser "Buena o Mala". Por ejemplo, la energía eléctrica: si la usamos para iluminar algo, ya sea nuestra casa, oficina, escuela, etc, es buena; pero si metemos el dedo en la toma corriente mojado y descalzos, es definitivamente mala.

Otro ejemplo de que el dinero es energía, son las monedas de cada país, en Colombia como en Estados Unidos, anteriormente el respaldo de las monedas era el "patrón oro" es decir que cada billete que circulaba por el país tenía su equivalente en oro. Pero hoy en día ya no es así, tanto el peso colombiano como el dólar, ya no se rigen por el patrón oro, sino por el contrario es la representación de la salud financiera y económica del país. Es algo espiritual, es un símbolo de confianza.

Cuando utilizamos el dinero para compartir, para hacer proyectos que beneficien a todo el mundo, para disfrutar de la familia, para estar en humildad y armonía, para hacer que las personas crezcan, el dinero será una fuerza benefactora, es decir la energía del bien. Pero si el dinero aparece en tu vida cuando no te lo has ganado, o no te lo mereces o es obtenido por necesidad, o por avaricia y lo utilizas para satisfacer tus deseos egoístas, para destruir al otro, entonces el dinero te destruye, es decir es la energía del mal.

Y, Cómo el dinero destruye?: por la Ley de Causa y Efecto, todo lo que has dado o generado, será regresado a ti en igual o mayor proporción.

Pero hay que tener en cuenta una cosa, que cuando hablo de compartir el dinero, no es dárselo al otro sin más ni más, sin ganarlo, sin merecerlo; por que ahí caeríamos como el hombre de una vieja historia Kabbalística, " Había una vez un hombre rico que daba continuamente dinero a un hombre pobre. El hombre rico, daba, daba y daba; mientras tanto, el hombre pobre seguía recibiendo, recibiendo, recibiendo. Un día, al cabo del tiempo, en lugar de sentir gratitud, el hombre pobre comenzó a sentir resentimiento hacía el hombre rico; al final terminó odiándolo". Esta historia se repite con mucha frecuencia, entre amigos, familiares y conocidos. Terminan por no hablarte, te responsabilizan de todo el mal que les pasa y jamas te agradecen el amor con que has dado.

Por lo tanto, el dinero es energía, abundancia y amor. Pero debemos tener conciencia de ello. El mundo es tuyo pero tienes que ganartelo.

Om Shanti.